Archivos
- junio 2020 (10)
- abril 2020 (3)
- diciembre 2019 (1)
- junio 2019 (3)
- mayo 2019 (1)
- abril 2019 (1)
- marzo 2019 (2)
- febrero 2019 (1)
- enero 2019 (2)
- diciembre 2018 (1)
- octubre 2018 (1)
- junio 2018 (2)
- mayo 2018 (1)
- abril 2018 (3)
- febrero 2018 (3)
- enero 2018 (1)
- diciembre 2017 (1)
- noviembre 2017 (2)
- octubre 2017 (1)
- septiembre 2017 (2)
- junio 2017 (1)
- mayo 2017 (1)
- abril 2017 (4)
- marzo 2017 (5)
- febrero 2017 (6)
- enero 2017 (3)
- diciembre 2016 (4)
- noviembre 2016 (1)
- octubre 2016 (1)
- junio 2016 (1)
- mayo 2016 (2)
- marzo 2016 (6)
- febrero 2016 (4)
- enero 2016 (14)
- diciembre 2015 (2)
- noviembre 2015 (3)
- octubre 2015 (2)
- septiembre 2015 (1)
- junio 2015 (1)
- mayo 2015 (1)
- enero 2015 (1)
- noviembre 2014 (8)
- junio 2014 (2)
- mayo 2014 (1)
- abril 2014 (5)
- marzo 2014 (4)
- febrero 2014 (1)
- enero 2014 (1)
- octubre 2013 (3)
- septiembre 2013 (3)
- mayo 2013 (5)
- abril 2013 (1)
- marzo 2013 (2)
- febrero 2013 (6)
- enero 2013 (2)
- diciembre 2012 (3)
- noviembre 2012 (2)
- octubre 2012 (1)
- septiembre 2012 (2)
- julio 2012 (1)
- junio 2012 (3)
- enero 2012 (2)
- octubre 2011 (1)
- septiembre 2011 (1)
- julio 2011 (1)
- marzo 2011 (2)
- febrero 2011 (2)
- enero 2011 (2)
- noviembre 2010 (1)
- octubre 2010 (2)
Facebook Valnalón
Crean piel artificial para robots inspirada en los pulpos
Un equipo de ingenieros de Estados Unidos creó una piel artificial súper extensible, inspirada en la piel de los pulpos, que puede revolucionar el mundo de la robótica y de las tecnologías “para vestir”, según un estudio publicado en la revista de la Asociación Estadounidense para el Avance de las Ciencias (AAAS).
La nueva piel artificial se puede estirar hasta el 500% de su superficie original, según la investigación de la Cornell University realizada en la isla de Ítaca, al norte del estado de Nueva York. La “piel de pulpo” abre un nuevo horizonte de posibilidades en la llamada industria de la “electrónica blanda” en la que se incluyen los aparatos que se pueden incorporar a la tecnología vestible o wearables.
El tejido puede estirarse, sentir la presión y emitir luz, con lo que alcanza el mismo nivel de multifuncionalidad igual a la piel de los pulpos, detalla el trabajo. La línea de investigación centrada en la llamada “señalización óptica” también podría dar un giro, ya que el nuevo tejido es capaz de emitir luces de múltiples colores, a partir de una matriz de cálculos que lleva incorporada.
Los robots prototípicos en los que se ha implementado la piel de pulpo se deslizan por el suelo como si de una culebra se tratara, para exprimir el potencial del tejido, que se expande y contrae en sentido lineal. La resistencia está garantizada por mucha fuerza que se ejerza sobre estos robots, gracias a un sistema de detección electromagnética de la presión que reduce la vulnerabilidad.